Una Jugada que debe Conocer por Helen Sobel

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Helen Sobel and Charles Goren
Helen Sobel and Charles Goren

The Milwaukee Journal – 27 Ene 1950

Tres declarantes de cada 10 que estuvieron sentados en Sur cuando se jugo la mano de hoy se fueron abajo, a pesar que la jugada involucrada debería haber sido sencilla de entender para cualquier jugador bastante experimentado. Pero, sorprendentemente, la mano se jugo en un campeonato estatal. ¿Hubiera usted hecho cuatro espadas con las cartas de Norte-Sur?

Sur dador; ambos lados vulnerable

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En las 10 mesas el contrato final fue de cuatro espadas por Sur, en la mayoría la subasta fue, una espada por Sur, dos diamantes por Norte, cuatro espadas de Sur.

Invariablemente la salida fue la dama de corazones y, por supuesto, fue ganada con el as de Sur. Claramente se debía perder el as de diamantes y era simplemente una cuestión de no perder más de dos bazas de triunfo. Los 10 declarantes jugaron el as de espadas en la baza dos y los tres desventurados que perdieron la mano continuaron con el valet o diez: uno de sus iguales.

Obviamente los tres tuvieron que perder tres bazas de triunfo y se fueron abajo. No fue mala suerte, ya sea debido a la inexperiencia o a un llano descuido, habían abordado el palo de una manera que sólo podía perder.

Faltando seis espadas al rey-dama, incluido el nueve y el ocho nada se puede ganar jugando un honor en la segunda ronda del palo. Después del as se debe seguir con una de las espadas chicas y ésta debe ser la jugada ganadora en contra de cualquier posible distribución del palo.

Si el palo esta 3-3 jugar bajo no pierde nada. ¿Qué diferencia hace si un humilde ocho o nueve captura la segunda ronda de los oponentes, siempre que el rey y la dama caigan juntos en la tercera ronda «.

Pero si bien el rey o la dama esta doubleton en alguna de las manos, y con qué frecuencia esto va a suceder, la espada chica será igualmente efectiva para sacar ese honor del juego en la segunda ronda y el declarante tendrá todavía el valet y el diez para que el rey y el nueve hagan una sola baza. En resumen el juego del valet o el 10 no es nada más ni menos que un «hábito», mientras que jugar bajo debería tomar sólo unos segundos de pensamiento lógico para todos, salvo para un principiante.