Fuente: The Bridge Bum: My Life and Play escrito por Alan Sontag
Bob Sheehan me contó una historia divertida de Reese-Schapiro. Reese no tenía sentido del humor. Reese había ido al departamento de Schapiro unos años antes para recoger muchos trofeos que había ganado, que los guardaba en la cas de Schapiro. Reese los cargo a todos ellos en una bolsa desaliñada y se dirigió a su casa. Estaba vestido de la manera en que la mayoría de los jugadores de bridge lo hace – MAL – y un policia lo detuvo e inspeccionó la bolsa desaliñada.
«¿Qué tenemos aquí?» preguntó el policia, sacando el Trofeo del Campeonato de Mundo de Reese y girandolo una y otra vez en sus manos.
«Eso es mio» dijo Reese.
«Seguro,» dijo el policia. «Usted es Su Majestad la Reina y estas son las joyas de la corona.»
«Vea le puedo demostrar que son míos»
El indignado Reese dirigió al policia al departamento de Schapiro.
«Dile, Boris», dijo Reese. «Dile a esta porqueria de policia que estos trofeos son míos!»
«Quien es este hombre?» pregunto Schapiro. Que significa esto? ¿Por qué me trae a un loco a mi casa?
Reese pasó la noche en la cárcel y nunca creyo que el incidente fuera ni un poco divertido.