Fuente: Mr. Bridge
Mi tío el Barón von Munchausen, tiene un verdadero conocimiento enciclopédico del juego del bridge, junto con un toque rayano a la clarividencia en el juego de las cartas y, lo más importante, del juego de los oponentes. En esta ocasión, sin embargo, él quedó brevemente desconcertado. Me enteré del cuento por su antiguo compañero, el difunto marqués de Sade. Esto fue antes que mi tío heredara la baronía, y él estaba jugando sus padres.
El tío Leo era Sur, y abrio de 1NT con vulnerabilidad en contra. El viejo Barón sobre-declaró 2NT — una convención que mi tío desprecia por su carácter revelador. Después de dos pasos (uno puede simpatizar con la baronesa) el tío Leopoldo reabrió con un doblo. Munchausen padre redobló (SOS) y el Marqués (Norte) dijo 3NT, que le doblaron y redoblaron en menos de un segundo.
Oeste salio con el K, y de Sade tendió el muerto. `Alors, mon brave,’ entonó con tristeza, yo tengo la esperanza de que mis dos diez puedan valer una baza cada uno, por la subasta… veamos…
Excelente valuación, mi querido Camille!’ sonrió el heredero mientras ganaba en la mano y hacia la finesse al 6. Después de un corazon a la dama, vino otra finesse de diamante, siguió corazon al A y otra finesse de diamante. «Asumiendo que no has ocultado un palo séptimo fuerte de espadas, Mama,’ anunció el declarante, ‘el contrato esta tendido. Cobro mi as de espadas para sacarle la ultima carta de escape a Papa y juego un trebol al 10 de la mesa.
«Si aflojas, Papa, cobro el A para mi novena baza; así que mejor toma la baza — es demasiado alta para que Mama la cubra. Si ganas esta baza, puedes hacer 4 bazas de trebol antes que yo haga la finesse de diamante, con tu vuelta de diamante.
Como puedes notar, Camille, cada 10 valia una baza. La mano establece una especie de record, supongo, ya que yo apostaría mil Marcas contra un cuarto de penique de bronce que nadie ha hecho previamente cuatro finesses en un solo palo!
«Bravo», anuncio el Viejo Baron, «aunque no puedes, de hecho, obligarme a tomar el trebol para darte tu breve momento de gloria «.
El Baron ya había comenzado a escribir con su lápiz una mano en su servilleta. «Curiosamente, Leopoldo, esta fue una mano decisiva en la final del torneo local de equipos, apenas la semana pasada».
El jugador en la otra mesa, en mi asiento, abrió de 1 con las cartas de Sur, yo preferi abrir de 1 — después de todo, imagínense el desastre si finalmente mi compañero tiene la salida y sale a corazón en contra de un contrato contrario!
Oeste sobre-declaro un 3 fuerte, y tu madre desde ya dijo 4. Este se fue directamente a 6, yo dije 6, Oeste obviamente mostró el as de triunfo cuando dijo 7, y tu querida madre siguio a 7, que fueron tontamente doblados por Este.
«Oeste optó por reducir nuestro poder de fallo con una salida a triunfo, pero no había ninguna defensa. Gané en la mano y jugué un corazón, por la quíntuple finesse marcada. Cuando la carta fue cubierta, falle y volví a la mano fallando un palo menor y repetí el proceso. Con el tiempo, después de la quinta finesse fallada, volví a mi mano con mi último triunfo y cobré los dos buenos corazones. Metió la mano en el bolsillo, ‘Así que no voy a necesitar este céntimo …’
Nota del Autor
El barón vive en un mundo surrealista de distribuciones exóticas y circunstancias escandalosas; pero las posibilidades incorporadas en estas 52 cartas de colores son bastante reales, y con frecuencia algún tipo de agujero de gusano en el tejido del espacio-tiempo del bridge se abre para permitir una visión de ese otro universo. Justo el otro día, recibí esta mano en el duplicado semanal en el Club de Bridge Wearside en Sunderland:
La vulnerabilidad, crucialmente era desfavorable. Esta es una mano similar a la del Viejo Barón. El jugador a mi izquierda abrió de 2 débil, que le apoyaron a 4. Que hace usted?
Con un partner que conozco, 4NT sugeriría una bicolor, pero nunca habíamos jugado antes, así que dije 5. El abridor dijo 5, que mi partner dobló…era nuevamente mi turno. Ahora me hubiera gustado haber sido tan previsor como mi tío, porque tenía la horrible sensación de que una salida a corazón iba a ser desastrosa. Así que dije 6.
Esta fue una decisión desafortunada: las espadas y los diamantes estaban 3-0 lo que significaba que 5 no se podían cumplir aun con la horrible salida a corazon, mientras que 6 o 6 se iban dos abajo doblados. -500 un cero absoluto.
Me hizo gracia,ver enfrente mio que la mano de mi compañero era totalmente equilibrada. Bizarro. Munchausen hubiera aprobado.