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El Toque Experto by Jeff Rubens

Source: It’s All in the Game by Jeff Rubens and Bob Ewen

El Gran Experto estaba sentado en una silla en la esquina más alejada del club de bridge, hojeando las páginas de un libro, yo, murmurando suavemente para juntar coraje, me acerqué al Maestro y esperé a que él me mirara y me favoreciera con una amistosa sonrisa.

«He oído que usted es un experto en presencia en la mesa, o el arte de ser capaz de discernir por el comportamiento de los opositores la ubicación de las cartas clave y la distribución de los palos cruciales», dije en una manera franca y atractiva. «No consigo desarrollar esta habilidad por mi mismo, y yo realmente apreciaria algunos consejos rápidos.»

Me miró en silencio unos instantes, después de lo cual una luz extraña apareció en sus ojos. «Le puedo enseñar una lección, si eso es lo que quiere.» dijo. Y sacando un lápiz, anotó esta mano en la parte de atrás de una planilla itinerante:

Dador Sur, Este-Oeste vulnerable

Oeste Norte Este Sur
1
2* 3 Pass 3
Pass 4 Todos Pass

* intermedio

Jugando un BAM de equipos de cuatro, Oeste cobra el rey y la dama de espadas, dijo el G.E., Este sigue el palo con el seis y el ocho. Oeste cambia al ocho de trebol, que Sur (usted) gana en la mano con el nueve. Usted cobra el as de corazón, y Oeste se acomoda un poco antes de dejar caer la dama. ¿Ahora que?»

Pensé un momento. -Bueno -dije-, por el Principio de Elección Restringida Oeste tiene casi el doble de probabilidades de tener una dama seca que la dama-doubleton. Además, Oeste sobre-declaró y es probable que este corto a corazon». Pensé un poco más. «Supongo que un jugador tiene más probabilidades de acomodarse con un singleton, en un intento de evitar jugar demasiado rápido, pero jugaría suavemente con un doubleton. Por lo tanto,» terminé triunfalmente, «voy a jugar a que Este tiene cuatro triunfos, hago la finesse de corazón, y juego un coup de triunfo para hacer cinco. »

En la mirada extrañada en los ojos del G.E. parecía crecer una sombra, cada vez más grande. «Muy nitido», concluyó. «Ahora veamos como maneja esta mano:

Oeste dador, Este-Oeste vulnerable

Oeste Norte Este Sur
 1  Doblo  2 4
Pass 4NT Pass 5
Pass 6 Todos Pass

«Es el final de una larga y dura sesión de rubber bridge», dijo el G.E. y usted ve que Este está sosteniendo sus cartas de modo descuidado y usted puede verlas.»

Mi mandíbula debió caerse, porque añadió: «Usted se sorprendería la frecuencia con la que los opositores prácticamente empujan sus cartas bajo su nariz, a pesar de sus repetidas advertencias.

Ve lo siguiente:

K 9 6 2      10 8 7   10 9 7 6 4

Oeste sale con el rey de trebol y cambia al cuatro de espadas, Este juega el rey. Usted gana con el as y juega la dama de corazón, Oeste sigue sin problemas con el seis.¿Cuál es su juego?

Todo el problema parecía bastante extraño, para decir poco, y le di al asunto un poco de mi pensamiento. De repente, la luz me iluminó. -Eso son solo 12 cartas en la mano de Este -afirmé, orgulloso de mis habilidades de detective. -¿Qué clase de jugador es Este?

«Un jugador difícil, muy difícil.»

-No me engañará con esta -le anuncié-. Esa decimotercera carta, probablemente escondida detrás de una de las otras, debe ser el rey de corazón, él me está mostrando un fallo para que yo haga la finesse, no la haré.

Los jugadores estaban empezando a reunirse para el juego de la noche, y mi consulta privada con el G.E. estaba claramente llegando a su fin. -Es el momento de un último caso -dijo-. Me mostró una mano en el libro que había estado leyendo, cubriendo las manos de Este-Oeste para que yo no pudiera verlas. -Todavía es rubber bridge -anunció-. «¿Cómo juega esta?»

Dador Oeste, Ambos lados vulnerables

Oeste Norte Este Sur
 1  Pass Pass Doblo
Pass 2 Pass 3NT
Pass Pass Pass

Oeste sale con el rey de espadas, Este juega el nueve.

«Yo aflojo.»

«Oeste continúa con la dama, Este sigue con el dos.»

Vuelvo a aflojar.

«Oeste juega el diez de espada, y Este juega el jack, que usted debe ganar con el as. ¿Qué juega después?»

Por ahora sentía que mi presencia en la mesa se estaba desarrollando maravillosamente. «Juego el as de corazón y veo la acción de la mesa», dije. «Oeste debe tener el rey de corazón por su apertura, pero necesito tener una pista en cuanto a la distribución del palo de corazón y la ubicación del valet de corazón.»

«En el segundo corazón», dijo mi instructor. «Oeste duda lo suficiente como para que usted lo note y luego juega un corazón bajo de su mano».

-¿Qué tan bueno es Oeste? Consulté.

-Bastante bueno -fue la respuesta-.

Pensé durante un tiempo y de repente todo sobre la mano, y sobre la presencia en la mesa, se hizo muy claro.

-Oeste debe querer que sepa que tiene el rey de corazon. Anuncié. «Empezó con cuatro corazones al rey-jack y quiere que yo ponga la dama del muerto para evitar que Este gane la mano. ¡Puedo jugar el diez de corazon del muerto con confianza, gracias por su valiosa lección!»

Soluciones

(Aunque no le dije antes que se trataba de un test, su presencia en la mesa debería haberlo discernido por el hecho de que no le mostré las manos completas.) «Esta lección está comenzando», ladro el G.E, para la diversión de varios transeúntes.

«Ha estado tan ocupado preocupándose por la presencia en la mesa que se ha olvidado cómo jugar al bridge!

En los cuatro corazones:

Dador Oeste Ambos lados vulnerables

Su forma de jugar perdería el contrato «, anunció fríamente el G.E. El declarante de la otra mesa atrapó el jack de corazón, haciendo cinco.

-Objeto!!! -dije amargamente. «El Principio de la Elección Restringida aparentemente ha sido derogado».

«Usted falló al notar,» respondió el G.E., «que su línea no podría haber hecho cinco.» Suponga que Este, que ha mostrado tres espadas, tuviera:

 J 8 6   J 6 5 4    J 9 8   6 5 4

Estudié la mano y me vi obligado a admitir que el G.E. tenia razón. Sus comentarios siguientes penetraron en mis sombrías reflexiones.

-En el segundo contrato, Este estaba un paso por delante suyo, su corazón oculto es el 9. Si estuviera jugando al bridge, hubiera notado que después de que Este apareciera con el rey de espada, Oeste no hubiera tenido apertura sin el rey de corazon».

No necesitaba preguntar por el tercer caso, porque sabía lo que me diría rápidamente. No me decepcionó. El G.E. me entregó el libro que había estado leyendo cuando entré, y vi que la mano completa era:

«Cuando juega el as de corazón, Oeste, que es bastante adepto a contar los puntos en cartas altas faltantes, desbloquea el rey. Ahora intente hacer nueve bazas.

«Este mano fue presentada en el libro, y en una columna de periódico recientemente, como un triunfo sobre los poderes de razonamiento de Oeste. He cambiado la subasta para enfatizar el punto de que el declarante estaba realmente dormido en el cambio».

-Ya veo -dije. «Debo jugar un corazón bajo en la baza cuatro, y poner la dama del muerto, si Oeste afloja. Entonces, puedo perder de forma segura una baza de corazón con Oeste jugando la segunda ronda desde el muerto. Esto puede perder si Este comenzó con un singleton bajo, pero es el mejor porcentaje de juego «.

«Cerca, pero no del todo,» disparó el G.E. «Puede darse la oportunidad completa si juega un diamante en la baza 4. Si el 10 de diamante aparece rápidamente, sólo necesita dos bazas para el game, y nada que Oeste haga puede hacerle daño. Pero si juega los corazones primero, Oeste puede tener el as del diamante como una entrada para sus dos ganadoras de corazón Entonces, incluso si el 10 de diamante cae en la tercera ronda, usted no tendrá tiempo para cobrar sus diamantes largos. Si Oeste afloja el as de diamante dos veces, usted puede siempre recurrir al palo de corazón como último recurso. »

-Al menos tuve compañía en esta mano -dije, pensando en el autor del libro y en el columnista del periódico. Cuando el G.E. Se levantó para salir, se me ocurrió una idea. «Ese jugador de Este en el segundo problema era bastante antiético y debería ser echado del bridge de por vida,» me quejé. «¿Quién fue?»

-He dicho al principio que le enseñaría una lección, ¿verdad? Dijo el G.E. con una sonrisa congelada. «Esa mano nunca ocurrió, la inventé sólo para usted.»

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