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La meta del declarante en la gran mayoría de los contratos a palo es mantener el control de triunfo, la capacidad de extraerle a los enemigos los pequeños triunfos y asi poder disfrutar de sus ganadoras en los palos secundarios. Esta tarea suele ser fácil con nueve o más triunfos. Los contratos con ocho triunfos son los que con frecuencia causan problemas.
Este articulo explica las técnicas mas importantes sobre la manipulación del palo de triunfo y las maneras de hacer frente, cuando los oponentes tratan de acortar sus triunfos.
Aflojando el primer triunfo
Quien tenga el as de triunfo tiene un gran control sobre el juego. Si tiene la salida, se pueden dar dos vueltas de triunfo en cualquier momento; y si no se tiene la salida, la salida se puede obtener cuando se juegue un triunfo. Como declarante a menudo es prudente no liberar esta carta.
[box]Si usted tiene el as de triunfo (sin el rey) y espera perder dos bazas de triunfo, por lo general es mejor aflojar la primera ronda.[/box]
Su palo de triunfo es endeble pero el contrato es bueno. A UD le gustaría jugar exactamente dos vueltas de triunfo, después de lo cual usted fallaría los dos corazones bajos del muerto. Todo lo que necesita es que el triunfo esté 3-2, siempre que aproveche el A para controlar el juego.
Gane la salida con el K y afloje una espada (jugada clave). Cualquiera sea la vuelta usted sigue cobrando el A y comienza a fallar. El único triunfo que queda afuera será alto, así que no hace ninguna diferencia si o cuando un oponente falla.
Negarse a la Finesse
Cuando el palo de triunfo del declarante tiene una perdedora interna (típicamente la dama), la mejor estrategia es por lo general dar dos vueltas de triunfo para dejar a un oponente con el triunfo alto y dejarlo que falle lo que le plazca. Por desgracia, el declarante es a menudo inducido a hacer una finesse de triunfo perdedora, después de la cual es necesario sacar tres vueltas de triunfo o se corre el riesgo de dejar a un oponente con un pequeño triunfo.
[box]Si su contrato está a salvo con una distribucion 3-2 de triunfo, no haga la finesse a la dama de triunfo si su pérdida podría poner en peligro el contrato. Asegúrese de entender que esto sólo se aplica si usted puede permitirse perder una baza de triunfo. Si no es así, una finesse es la jugada correcta cuando tiene ocho cartas y le falta la dama de triunfo.[/box]
Asumiendo una perdedora de triunfo usted tiene 9 bazas de arriba y el palo de corazon le ofrece la única chance por la décima baza. A menos que los corazones estén 3-3 (poco probable) usted deberá fallar el 3 en el muerto después de dar dos vueltas de triunfo. Si usted hace la finesse y la pierde, usted se va a ir abajo porque a Oeste le va a quedar un triunfo chico para fallar su tercera ronda de corazon.
La solución es negarse a hacer la finesse de triunfo. Simplemente cobre el A-K y juegue los corazones altos — el único fallo que puede hacer Oeste es con su baza natural de triunfo.
En esencia, se trata de una cuestión de elección: depender de una distribucion 3-2 (68 por ciento) en lugar de una finesse (50 por ciento), una decisión al borde que va a darle un gran beneficio en el largo plazo.
Sacando el triunfo Alto
En la mayoría de los casos no es necesario sacar el ultimo triunfo cuando a uno de los oponentes le queda un triunfo alto – usted solo juega su palo lateral y lo deja fallar cuando le plazca. Una excepción ocurre cuando una mano (por lo general el muerto) tiene un palo lateral largo y hay una sola entrada, en cuyo caso un fallo prematuro podría dejarlo fuera de la posibilidad de llegar a su palo largo para siempre.
[box]Si necesita correr un palo largo sin ser interrumpido por un fallo, juegue primero un triunfo para sacar el triunfo alto de su oponente.[/box]
Después de ganar con el K usted rutinariamente cobra el A-K. La tentación ahora es correr los corazones con la esperanza de desprenderse de los tréboles; pero Oeste falla cuando usted descartar su primer trebol, después de lo cual ya nunca mas entrará al muerto. Usted no va a disfrutar del final; los oponentes salen jugando trebol forzándolo a fallar, y usted va a tener que jugar diamante desde su mano – una abajo.
La solución es simple una vez que piensa en ella. Sólo debe jugar un tercer triunfo para que Oeste juegue su triunfo alto antes que usted juegue los corazones, de modo que él no pueda fallar. Los oponentes pueden ganar sus bazas de trébol (o perderlas todas si no las juegan), pero usted va a ganar el resto. Tenga en cuenta que ni siquiera necesita la finesse de diamantes.
Retrasando el destriunfar
La tarea más difícil del declarante es la de mantener el control de triunfo cuando los defensores acortan sus triunfos haciéndolo fallar temprano en el juego. Esto se llama una «defensa forcing/obligada», y puede ser mortal si el declarante no tiene cuidado.
Una contra-medida eficaz a la «defensa forcing/obligada» es retrasar el destriunfar. El propósito es mantener al menos un triunfo en cada mano, entonces, si en una mano se agotan los triunfos, el lado opuesto puede hacerse cargo de mantener el control.
[box]Si los oponentes lo hacen fallar temprano con un fit de triunfo 5-3, por lo general es necesario retrasar la tercera ronda de triunfo.[/box]
Los oponentes comienzan con dos rondas de corazones lo que lo obliga a fallar. UD juega una espada al K del muerto y luego una espada de vuelta a su 10 que Oeste gana con el as. Otro corazón lo fuerza a fallar de nuevo, dejándolo con un triunfo en cada mano. Si usted saca el último triunfo ahora, su contrato es historia – tan pronto como Este gane el K, los oponentes cobrarán dos bazas de corazón.
Debe dejar a Oeste con su triunfo y hacer la finesse de trebol: Chico a la dama, esta es la mejor manera de disminuir la probabilidad de un afloje – si usted juega el valet, un jugador astuto en Este afloja la primera vuelta y gana la segunda vuelta para darle a Oeste un fallo.
UD puede manejar cualquier cosa que vuelva Este. Si es un corazón, usted puede fallar en una mano y cruzar al otro lado con diamante para sacarle el último triunfo a Oeste.
Descartando una Perdedora
Otra técnica para evitar que se reduzcan sus triunfos es negarse a fallar – a veces en su lugar va a tener para desprenderse de una perdedora segura. Si los oponentes persisten con una defensa obligada, es posible que pueda fallar en el lado opuesto.
Por desgracia, esta táctica es a menudo mal aplicada. Las situaciones de este tipo son confusas; el declarante debe sopesar las consecuencias de fallar frente a descartar en una base de caso por caso. Una palabra de precaución:
[box]Antes de deshacerse de una perdedora en lugar de fallar, compruebe que no va a empeorar la situación. Pregúntese: «¿Qué pueden hacer ellos después, si les dejo ganar la baza?”[/box]
UD falla la segunda vuelta de corazon y gana el A y el K para descubrir que el triunfo esta 4-1. Note la técnica de dejar el palo de triunfo flexible (J frente Q-10) le quedan solo triunfos altos. NO juegue mas triunfo, para dejar un triunfo en el muerto. Juegue el 9 y déjelo correr a la dama de Este, y asuma que Este vuelve otro corazon.
Si falla le quedaran menos triunfos que a Oeste, y la mano va a colapsar. En vez de fallar deshágase de un trebol. Como ahora el muerto también esta sin corazón, no hay vuelta que le pueda hacer daño y usted puede ganar fácilmente al resto de las bazas.
Tenga en cuenta la importancia de hacer la finesse de diamantes en la primera ronda – si cobra el as o el rey primero, Este podría derrotarlo al darle a Oeste un fallo de diamante.
Volviendo a Ganar el Control
En algunos casos es inevitable que el enemigo lo va a acortar en triunfo de manera que un oponente tendrá más triunfos que usted. Es posible que aún pueda sobrevivir si tiene con cuidado con el juego. No pase por alto la posibilidad de cambiar su línea de juego a un fallo-cruzado, a menudo puede llegar a hacer las suficientes bazas a pesar de la defensa forcing.
Si un fallo-cruzado no funciona, su única esperanza es recuperar el control de triunfo al forzar al oponente a fallar – tratando de acortar sus triunfos del mismo modo que él ha acortado los suyos.
Usted falla la segunda vuelta de corazón, cobra A-K, y a continuación juega un diamante. Oeste gana con el A en la segunda ronda mientras Este descarta un trebol. Si Oeste le da a Este un fallo de diamante (mala defensa), usted no tendrá ningún problema así que asuma que Oeste vuelve un tercer corazón y usted falla. Sería un error descartar en el tercer corazón, ya que un cuarto corazón paraliza su tenencia de triunfo (un fallo en cada mano es mortal) o Este podría fallar un diamante.
En este punto usted tiene una espada alta en cada mano y Este tiene dos espadas. No juegue su triunfo. Juegue sus diamantes altos hasta que Este falle, después de lo cual puede destriunfar con su último triunfo y hacer de su contrato.
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