Toledo Blade – 11 Dic 1960
Algunas personas juegan al bridge por diversión, otros juegan para pasar el tiempo. Algunos juegan el juego por la emoción de la ejecución de un contrato difícil, otros para mantenerse al corriente de los chismes del vecindario. Cualquiera sea la razón, la mayoría de los jugadores de bridge son adictos y no hay cura conocida. El siguiente artículo es un extracto de «The Mad World of Bridge» por Jack Olsen.
La Sra THOMPSON de Detroit estaba jugando al bridge en la casa de un vecino una noche invernal hace unos años cuando unos amigos se acercaron a decirle que su casa estaba en llamas. La Sra. Thompson expresó su preocupación, pero se sentó y dijo: «Vamos, vamos a terminar el rubber.»
Una hora más tarde, mientras jugaba un contrato de 1NT, un reportero irrumpió y le preguntó sobre que tenía que decir sobre el fuego.
«Yo no sé nada al respecto», dijo la Sra. Thompson con irritación.
«La casa está en llamas, como se puede ver claramente, pero estamos afortunadamente en su exterior y eso es todo lo que hay que decir.»
Ella puso la dama de diamantes sobre la mesa y continuó con el juego.
La Sra. Thompson, se podría decir, estaba claramente enganchada por el juego que ha sido descrito como una psicosis ubicada algún lugar entre la esquizofrenia y la paranoia, siendo la combinación de algunas de las mejores características de cada una de estas dos enfermedades. El bridge tiene cientos de miles de adictos, pero aun no se ha inventado alguna cura. Sobre Alcohólicos reformados hemos oído hablar, pero quién sabe sobre un jugador de bridge reformado?
COMO LA SRA. Thompson y un sinnúmero de divorciados y algunas viudas pueden dar fe, el juego del bridge tiene un agarre de acero sobre sus víctimas. Y esto a pesar de sus peligros. La señora Marianne Elkins una vez recibió una mano que contenia 13 diamantes y declaro un contrato de seis sin triunfo. Cuando ella se fue 12 abajo, su marido la golpeó con un cenicero de cristal tallado.
La señora Hazel Bowen de Seattle consiguió un divorcio y una propiedad de 510.000 dolares cuando ella testificó que su marido, George, la atacó después de que ella paso sobre un doblo de saque.
Entonces, ¿por qué tanta gente juega bridge? La respuesta es simple: Porque es divertido; porque es un desafío intelectual; una manera de hablar con los vecinos; una manera de sacar la vieja mente del trabajo por un tiempo, y …. ¿Correcto? ¡Incorrecto! Al menos estas ideas son erróneas, de acuerdo a los muchos expertos que han sondeado las profundidades de la psique nacional.
El bridge, resulta que no es divertido: es una tarea, una forma de evadirse de la vida, un medio de ventilar hostilidades profundas.»La mayoría de la gente», dijo el psicoanalista Alfred Adler, «juega al bridge para perder el tiempo.»
A lo que el difunto Ely Culbertson, siempre listo para defender el bridge y sus $ 500.000 ingresos anuales, respondió: «El argumento es una verdad a medias.»…
«Una subasta de Slam bien construida o un squeeze contienen la misma chispa divina de la inteligencia superior y contienen las mismas inferencias sutiles y profundas de la creación de una catedral Gotica con sus altas torres, o de un soneto bien escrito o de una máquina de contabilidad «.
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